Buenas, buenas, buenas. ¿Qué tal? Y gracias por haber clikado en el enlace. Y ya que has llegado hasta aquí, dedicame 30 segundos, seguro que te interesa.
Una historia real.Hace unos días fue el cumpleaños de una buena amiga y por supuesto quería hacerle un regalo. No se porque pero eso de tener que regalar sea por el motivo que sea siempre me pone nerviosa, buscar algo que le guste a la persona en cuestión, que le siente bien, que sea práctico, que sea moderno, que sea, que sea y que sea. Total que con tantas dudas al final acabo a veces comprando cosas sin sentido.
Por esto el otro día se me ocurrió algo que es práctico, le sentará bien al homenajeado, moderno y seguro que le gusta. ¿Qué será, será? Pues una tarjeta regalo. "ohhhhhh" seguro que estaréis pensando, "esta se piensa que a descubierto América", pues ya se que no, pero no me digas que no es una buena idea.
Normalmente son las grandes casas de ropa y demás las que nos ofrecen estas alternativas y pensé ¿Y por qué yo no? Además, siendo sincera, digamos que tuve una ayudita ya que una clienta, por esas mismas fechas, un día me preguntó si tenía estos "vales regalo" "cheque..." o como querais llamarles ya que ella también tenía que hacer un regalo. Esto unido al cumple de mi amiga, voilà. Plecs®als.
He hecho de 3 tipos, con diferentes importes, con colores y diseños distintos para diferenciarlos con facilidad y hoy, domingo por la tarde, a las 16:38 estoy escribiendo un post en mi blog primaveral para su presentación oficial. Aquí están, esperando os gusten y los useis. Un guiño.
Por cierto ¿Alguien sabe que le regale a mi amiga? Hasta pronto.